sábado, 30 de julio de 2011

Momias

No me gustaron. No me encantó eso de Guanajuato. Las momias, el museo donde se exponen esos cadáveres momificados me resultaron a final de cuentas, un triste y morboso espectáculo. Particularmente el de la mujer que padeció catalepsia y fue enterrada viva por error.
Son cuerpos momificados que no consumieron los gusanos.
Son cuerpos secos que se exhiben para obtener dinero en las arcas del gobierno.
Son cuerpos con menos de doscientos años de haber sido sepultados.
Acabo de regresar hace un par de horas de un viaje (vía terrestre) que me pareció eterno en ciertos momentos. Mas de 36 horas seguidas montada en un autobús solo para llegar al primer destino, que resultó ser también decepcionante. La ciudad de Guadalajara... yo esperaba mas... belleza arquitectónica, rosas de muchos colores, higiene, folklore y sabe Dios cuántas cosas mas.
Vivo en el norte de mi país ¿quién me lo manda?
En zona desértica. Muy cerca de los gringos. Con ojos hambrientos de artesanías mexicanas. Y muy lejos del centro de la República Mexicana.
Estuve en seis estados diferentes: Jalisco, Michoacán, Guanajuato, San Luis Potosí, Zacatecas y Aguascalientes.
En... ya perdí la cuenta de tantos pueblos y ciudades.
Estoy algo cansada. Luego le sigo.

martes, 12 de julio de 2011

Regreso al sol







Hoy regreso al sol.
A la vida tórrida de los hijos del desierto.
Regreso a las rutinas de la vida seria.
La de casa, la del mundo.
Regreso a las crisis domésticas.
A lo hartamente conocido.
Regreso a las responsabilidades y horarios.
Es una vuelta obligada a todo aquello,
donde no estarás nunca mas tú.

jueves, 7 de julio de 2011

El pesto

Mezcla de aceite de oliva extra virgen, piñones tostados (pueden ser almendras), queso parmesano (o de cabra) albahaca y un diente de ajo.
Se machacan los ingredientes en un mortero (acá usamos "molcajetes") primero la albahaca con el ajo, luego el aceite, los piñones y el queso. Debe quedar todo bien mezclado.
Se degusta en pastas o sobre pan tostado.
Tiene un sabor fuerte y delicioso.
Así que, si gustas,  se acompaña con una buena copa de vino tinto.

miércoles, 6 de julio de 2011

¡Por fin!

No se lo que sucedió, pero finalmente la cuenta me dejó acceder a mi blog.

ESTUVE TRABAJANDO EN UN CUENTO... perdón por el grito. Un cuento chino.

Ya lo publicaré si esta cosa me deja hacerlo.

martes, 5 de julio de 2011

De turistas en San Antonio de las Minas

Arbusto manzanito.

El exhibidor del chico era un tronco de árbol. Un trozo mas bien,  de algo así como 70 centímetros de largo, con algunos brazos un poco mas cortos. Todo pintado de azul añil. Colgaban de este, collares, aretes, pulseras. Adornos diversos realizados por el mismo artesano. También se había fabricado una especie de mampara pequeña, con el mismo tono de azul. Al lado de este artesano, había una mesa no muy grande, repleta de frascos con diversas compotas, mermeladas, aceites y salsas. Eso había sido lo que llamó mi atención en primer lugar. Iba en busca de pesto. Me lo habían recomendado tiempo atrás y supuse que tal vez, en ese micro tianguis habría. No fue así, pero igual estuvimos curioseando un rato.
La pintora, vecina de los otros comerciantes. También tenía expuesta la mercancía de manera muy original. Raíces secas de manzanitos, abundantes en la región, lucían los anillos y gargantillas que ella misma decoraba con materiales reciclados, piedras, concha de abulón pulida, cordel, alambre, tiras de piel y mas cosas. Si te ponías a ver con mas detenimiento, la variedad de artículos comunes, convertidos en artesanías, eran muchos.
Eso me gusta. La mayoría de las tiendas de curiosidades y artesanías del puerto, son traidas de otros estados de la República Mexicana. Abundan también las cosas manufacturadas en China, Korea o Singapur y los clones de cosas que se supone son nacionales, pero llevan sellos de otros lares. Aquí no vimos eso. San Antonio de las Minas tiene artesanos y artesanías de la región. Rústicas, coloridas, diversas y muy interesantes.
Luego de esta parada obligatoria, fuimos caminando al sitio donde nos indicaron podríamos encontrar pesto del día. Era una cremería, con quesos, vinos, pan y en general artículos comestibles artesanales.
Los quesos aromatizados y/o saborizados llamaron nuestra atención. Quesos con romero, chipotle, aceitunas negras, albahaca, naturales, añejos, frescos, tiernos. En fin, muchos, muchos tipos de quesos y cremas.
Compré el pesto, algo de pan y un par de quesos saborizados. El pesto, por cierto, no era todo lo maravilloso que me habían dicho. Pero no estaba tan mal. El aceite de oliva, por otro lado, merece mención aparte.
San Antonio de las minas está ubicado donde da inicio la ruta del vino. Saliendo de la ciudad de Ensenada. A unos 90 km de distancia. Es en ese lugar donde comienzan los viñedos que hacen famosa la región. Leí en Internet que tiene 4 habitantes. Solo que hayan sido fantasmas con los que estuve alternando el sábado, me parece que se quedaron cortos con la informaciçon y son mas de 4 gentes las que viven ahí. Es ciertamente un pueblo pequeño, pero no tan pequeñitito.
El sol caía a plomo, seguimos nuestro camino buscando el restaurante vivero que ya había visitado en una ocasión anterior. La Hacienda restaurante, no está a borde de carretera, hay que avanzar un poco por caminos vecinales de terracería, pero vale la pena. Una parte del restaurante es techada. Pero la mayoría de las mesas se encuentran bajo los árboles y entre la vegetación que abunda. Yo supongo, que es el lecho de un arroyo porque además del suelo arenoso, hay muchos encinos. Amén de la incontable cantidad de plantas, arbustos y flores que están a la venta.
Disfrutamos de un día muy agradable. Relajado y familiar. Sin contar con la comida, que dicho sea de paso, la crema de espinacas, el pollo horneado con frutas y los calamares estuvieron de 9.9
Ensenada y sus alrededores, tienen mucho para descubrir.