miércoles, 5 de diciembre de 2012

Las amigas


De repente sentí rabia. ¿Por qué demonios iba a colocarse a tiro de piedra OTRA VEZ? El tipo no le brindó lo que ella soñaba. Su relación era cómoda para él, pero ella esperaba mas. ¿Cómo demonios esperar mas de un tipo que no cerraba círculos? Un cobarde y mentiroso que aun vivía en la parte superior de la casa de su esposa "separado" pero cómodamente instalado en el mismo espacio. ¡Valiente separación!

Me repetí muchas veces que eso no debía importarme, que ella es bastante mayor como para saber lo que hace. Rebasa holgadamente los 45 años. Tiene mas de once de divorciada. Ha tenido mas parejas/noviazgos fallidos que nadie mas que yo conozca. Con este último "nuevo novio" me moría de aburrimiento solo de escuchar como se las gastaba el hombre con ella. A-bu-rri-do hasta la muerte. En algún momento le comenté, con la confianza de una amiga a otra: "oye, que van comenzando y ya tienen rutina de un matrimonio viejo y cansado" Era mi punto de vista solamente, pero no tenían dos meses de relación y se pasaban el sábado y a veces desde el viernes, viendo la tele en casa de él... mas bien en casa de la mamá de él, porque el cuate no llega a casa o departamento propio. Claro, con tres divorcios en sus alforjas, no le quedan recursos ni ganas de echarse otro compromiso. 

Mi muy querida amiga es de esas mujeres que lo dan todo, que se dan todas, que entregan sin condiciones (al principio) todo. Demasiado disponible. Dice para si misma y para quien quiera escucharla, que no le importa nada mas, que tomará las cosas como vengan, como sean y lo disfrutará igual por lo que dure. Pero luego comienza a quejarse de la falta de atenciones y compromiso de los cuates con los que ha andado.    Apenas la voy entendiendo. Pero no puedo seguirle el paso a sus razonamientos. La veo tirarse como tapete cada vez que hay un hombre en su camino. Ya perdí la cuenta de las veces que me ha plantado porque a última hora un hombre la llama para salir. ¿No se da cuenta? 

Será que creo que ella vale mucho porque es de buenos sentimientos, bonita por dentro y por fuera. Pero esta vez que mandó a volar al aburrido y a los dos días llamó al casado comodino con el que andaba antes para colocarse en modo "disponible" me pareció el colmo. Se lo dije, cuando me comentó como si tal cosa que le había hecho una petición al ex, le dije algo mas que seria: "luego no me andes preguntando por qué te pasa lo que te pasa con los hombres"

Fui ruda... lo reconozco... como dicen mis hermanas, "tomé dos píldoras de bruja" pero la verdad me exasperé un poco. Ahora deberé tomar pastillas de "es su vida, no me afecta, que haga lo que desee"... y si luego viene a llorar otra vez sobre mi hombro ¿para qué estamos entonces las amigas?

No hay comentarios: