viernes, 9 de abril de 2010

Pasos inciertos



A veces, ciertas cosas dejan de tener importancia. Sobre todo si te encuentras ante circunstancias adversas y fuera de tu control. La inminencia de cosas que sabemos, sobrepasan las fuerzas y las buenas intenciones de los seres humanos, terminan por ubicarnos en nuestra justa medida. Mas parecidos a granos de arena, que a los mimados de la creación, por así decirlo.

El miedo se agazapa. Pero está ahí. Omnipresente ante las circunstancias. No quiero regresar a Mexicali. Pero tengo que hacerlo tarde o temprano. Finalmente, lo que ha de ser, será.

Hace un par de años. Cuando un enjambre de temblores nos tenía tomados del cogote, tuve una experiencia que no olvido. Con todo y que aquel temblor no fue tan fuerte como el de este domingo de pascua. Cruzaba la explanada cívica del plantel, junto con una compañera. La plaza estaba hecha de concreto vaciado sobre redes metálicas y varilla de acero. Dio inicio el temblor justo cuando estábamos a medio camino entre la dirección y las aulas. El concreto pareció tomar la consistencia de gelatina. Veíamos olas de cemento. Por la dureza y consistencia del piso sabíamos de la imposibilidad de que eso estuviera sucediendo. Pero sucedía. Justo bajo nuestros pies, el concreto hacía olas y nos impedía seguir avanzando. Los niños y las maestras procedieron, en cuanto fue posible, con la evacuación ordenada de las aulas.
Cuando está temblando fuerte, dificilmente puedes sostenerte de pie o caminar.

De hoy en mas, evocaré eso, cuando esté temblando. Imaginaré que trato de avanzar sobre gelatina de colores variados e intensos y que las cosas mejorarán tarde o temprano.



2 comentarios:

arriero dijo...

Es normal lo que te ocurre. Yo no volvería si pudiera. El problema grande es que Mexicali forma parte de tu vida. Procura encontrar un material mas consistente que tu concreto, u hormigón para mí, para que aguante mas. Un beso.

Insumisa dijo...

Un material mas fuerte que todos, es la tierra. Pero se está quejando, Arriero. Intensa e incesantemente.

Gracias por acordarte de pasar por este lugar
Beso y abrazo