Llegaron los vientos del cambio. El día a día se convierte en oportunidades que si no se toman, pasan de largo.
Abrazos fraternos a la distancia. Por los que ya no están, por el vacío que nos dejan, por las enseñanzas, las risas, los llantos, los juegos y los sueños. Porque donde hay un espacio caben cosas. Arañas o flores. Pájaros muertos o rollos de listón. Basura o alimento para el alma. Amargura o sonrisas y gratitud. Yo elijo. Tú elijes.
Elijamos bien.
4 comentarios:
Ya veo, Piel de Letras, que no andas mal de espacio pero que no estás muy segura de qué poner en él.
A ver si tienes buen tino y lo rellenas con acierto.
Saluditos desde la madre patria. :-))
¿Y Quién en este mundo está seguro de algo, Señor... Anónimo?
Saluditos desde el "Nuevo Mundo"
ah las oportunidades que pasan de largo...! a veces intentar no perdérselas nos llena de ansiedad, porque es tan difícil saber qué dejar pasar y en qué concretarse...!
Por lo pronto, mi querida Zeltia, yo no dejé pasar la oportunidad de un viaje repentino con mis primas.
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